sábado, 11 de octubre de 2008

El adios de un amante

En la calida noche te escondes
Soñando con el no tener que marcharte
Ella sigue dormida, tu la vez
Es un ángel, el ángel que llego a tu vida
Para amarte solo a ti
Te levantas suave como la seda
Sin embargo ella se despierta
Toma tu mano antes que te levantes por completo
Pasa delicadamente tu mano por su rostro
La besa y dice en un susurro
“A pesar de tener la mano áspera como lija
Las siento suave como la seda
Y delicado como el satine”

Sonríes y la besas tiernamente
No sabes cuando la volverás a ver
Ni si te seguirá amando cuando llegue ese día
Tienes miedo de irte
Pero estas consiente del mal que causaras si te quedas
Se levanta con su cuerpo calido y desnudo
Abrazándote con la mas grande pasión del mundo
Una lagrima sale se sus ojos
Detestas verla llorar y te enloquece
Ser el motivo por el cual llora
Se ríe irónicamente y la acaricias
Quieres gritar que la amas
Pero sabes que esta fuera de tu alcance
Con todas tus fuerzas te alejas de ella
Te vistes rápidamente mientras ella te sonríe
Sales silenciosamente del cuarto
Cerrando con suavidad la puerta
No sin antes escucha un te amo de sus dulces labios

2 comentarios:

Kishiria dijo...

buen poema

NEKO HIME dijo...

se nota que estaba muty aburrida ese dia.
aveces asi me sentia es algo dificil y especialde describir.